domingo, 28 de noviembre de 2010

Ramón no va al colegio



Jolines, a mi primo
le pusieron sombrero,
por tomar dos pastillas,
le cayó el pelo.
Se ríe como siempre,
pero está blanco;
mi tía Juana lo mira
y le dice:
qué guapo estás, mi vida,
qué guapo estás tan calvo.
A lo mejor se va
por una temporada,
para que el sol le ponga
morenita la cara.
Y si se encuentra a gusto
seguro que no vuelve,
pero yo en vacaciones
le prometí ir a verle.
Y si no lo encontrara,
lanzo cohetes,
con estrellas azules
y chispas verdes.
Es tan aventurero...,
que hasta igual se le ocurre,
cabalgar con sombrero
a lomos de una nube...